Estimulación en la vida cotidiana: Atención

Los quehaceres cotidianos son una fuente de oportunidades para ejercitar nuestra mente sin necesidad de dedicar un tiempo específico a ello. Por eso hoy os ofrecemos una serie de actividades de atención especialmente pensadas para ponerlas en práctica en nuestra vida cotidiana.

 Actividades de estimulación: Atención

Uno de los problemas habituales que suelen dificultar la práctica de la estimulación cognitiva de una forma regular, suele ser la falta de tiempo. Se tiene una concepción de la realización de este tipo de actividades acorde con un modelo extendido de formato grupal en centros especializados para mayores, lo cual implica un desplazamiento que no siempre se quiere, o una inversión de tiempo de la que no se dispone. Aunque es conveniente que las sesiones de estimulación cognitiva estén supervisadas por un profesional, sobre todo en casos en que ya exista cierto deterioro de las habilidades mentales, a nivel preventivo podemos realizar una serie de ejercicios utilizando las mismas tareas que solemos realizar en nuestro día a día y que nos ayudarán a mantener nuestra mente más ágil.

En muchas ocasiones ocurren sucesos cotidianos que achacamos a pequeños problemas de memoria, cuando en realidad se deben a no haber prestado suficiente atención. Por ejemplo, ¿cuantos de nosotros hemos tenido que ir a comprobar si habíamos apagado o no el fuego? ¿o si habíamos encendido el calentador? El no recordar realizar estas acciones no se debe a un mal funcionamiento de nuestra memoria, sino al no haber estado atento a lo que estábamos haciendo en ese momento. Es lo que se denomina realizar acciones de forma "automática". 

Por eso hoy comenzamos ofreciendo un conjunto de actividades dedicadas a trabajar la capacidad de atención, por ser un función básica que en caso de estar deteriorada influirá especialmente en la ejecución del resto de capacidades. Estos ejercicios los podemos realizar nosotros mismos, pero también en caso de vivir con un familiar mayor, podemos aplicarlos con él y fomentar así la estimulación de sus capacidades cognitivas.  

EJERCICIOS PARA TRABAJAR ATENCIÓN


Aprovechando el desayuno: Si para desayunar calentamos la leche con un cazo al fuego a la manera tradicional, un ejercicio de mantenimiento de la atención puede ser, mientras preparamos el resto del desayuno, vigilar la leche para poder retirarla antes de que se derrame al hervir.

Muchas personas tienen la costumbre de leer el periódico mientras desayunan. En el periódico suele aparecer un apartado con pasatiempos como sopas de letras o juegos de diferencias, muy buenos para estimular nuestra atención.




La ropa es nuestra "amiga": Muchas veces los calcetines son muy parecidos entre sí y se mezclan en el cajón unos con otros. Podemos trabajar la atención, buscando la pareja de cada calcetín, atendiendo a la forma, color, desgaste, etc., para saber cual corresponde a cual.


Otra forma de estimular la atención puede ser clasificar la ropa sucia según el color y la delicadeza del tejido antes de meterla en la lavadora.




Mientras limpiamos: Todos tenemos objetos decorativos en casa. Elegiremos algunos de ellos, como por ejemplo un cuadro en la pared, para describir qué escena representa, colores que se han utilizado, formas que aparecen, personajes principales, etc.

Si en la habitación en la que nos encontramos hay algún reloj de pared, podemos prestar atención al tic-tac del reloj, para contar los segundos que han transcurrido en un periodo de tiempo determinado.

¡A los fogones!: Si tenemos la costumbre de escuchar la radio mientras cocinamos, podemos estar atentos al noticiero de cada día, para en otro momento contar los sucesos a alguien cercano o a nosotros mismos.

Podemos jugar a las palabras encadenadas con los alimentos que necesitamos para hacer la comida utilizando la última sílaba de la palabra anterior para decir una nueva palabra. Por ejemplo: 

. Garbanzo  -  Zorro  -  Ropa  -  Paloma  -  Mano ...
. Sopa  -  Pajaro  -  Ropa  -  Pantano  -  Noticia ...



Mientras vemos la televisión: Cuando vemos la televisión, se nos presentan muchas oportunidades de ejercitar nuestra mente. Debemos acostumbrarnos a hacer una 
visualización activa y no pasiva de lo que nos muestran los programas. Para trabajar la atención, un ejercicio sencillo lo podemos realizar cuando cambiamos de canal durante los anuncios. Debemos mantener nuestra atención en no distraernos con lo que nos muestra el nuevo canal para volver a cambiarlo antes de que finalice la pausa publicitaria.

Otro ejercicio que podemos realizar consiste en elegir una palabra común como por ejemplo "leer" y durante 10 minutos, cada vez que pronuncien la palabra leer en el programa, dar una palmada en la mesa.

También podemos encargarnos de avisar a alguien de nuestra familia cuando comience su programa favorito.



Otras actividades: Cuando tengamos previsto llamar por teléfono a algún familiar o amigo, podemos fijarnos una hora concreta, por ejemplo a las 19:00, e intentar cumplir con la llamada justo en el momento que nos habíamos propuesto.

Muchas veces miramos folletos de publicidad mientras hacemos otra tarea como mantener una conversación con alguien. Podemos intentar recordar productos y precios que hemos visto en el folleto, aunque estemos dedicando atención también a la otra tarea.

Acostumbrándonos a utilizar las tareas habituales de nuestra vida cotidiana para estimular nuestras capacidades cognitivas conseguiremos mantener más ágil nuestra mente sin necesidad de bloquear tiempo específico en la realización de dichas actividades.

Próximamente os ofreceremos nuevos ejercicios para trabajar otras funciones diferentes como memoria, lenguaje, cálculo o razonamiento.                     

ACTIVIDAD PROPUESTA

 ¿Qué tal si aprovechamos este artículo para ejercitar nuestras habilidades cognitivas?

 Capacidad estimulada: atención

La atención es el proceso por el cual podemos dirigir nuestros recursos mentales sobre algunos aspectos del medio, los más relevantes, o bien sobre la ejecución de determinadas acciones que consideramos más adecuadas entre las posibles. Hace referencia al estado de observación y de alerta que nos permite tomar conciencia de lo que ocurre en nuestro entorno (Ballesteros, 2000).

 Instrucciones: 

A continuación le ofrecemos un enlace a un juego online con el que ejercitará su capacidad de atención. Se trata de la clásica actividad de buscar las diferencias entre dos fotografías aparentemente iguales. Dispondrá de 15 ejercicios diferentes en los que deberá marcar donde se encuentra el error entre una imagen y su correspondiente. 

Para acceder a la actividad, pulse sobre la imagen inferior, luego espere 17 segundos y a continuación pulse sobre la palabra "play" 2 veces.